Si por fin te has decidido a seguir un tratamiento de Ortodoncia en las clínicas DALDENT, ¡enhorabuena! Muy pronto lucirás una sonrisa espectacular.
Para que el proceso sea un éxito, nuestro equipo te va a ofrecer una serie de consejos muy sencillos para cuidar de tu aparato y que éste se encuentre siempre en un estado óptimo.
- Utiliza productos específicos para la nueva etapa a la que se enfrenta tu cavidad oral. Si llevas brackets, es conveniente cambiar tu cepillo de dientes por otro diseñado especialmente para lograr una limpieza completa. Además, deberás hacerte con un pequeño cepillo interdental para limpiar entre los huecos que deja la ortodoncia. Para prevenir la aparición de las pequeñas aftas que puede causar la rozadura entre el material y los tejidos blandos de la boca, busca un dentífrico enriquecido con flúor y aloe vera.
- Cuando tienes brackets debes modificar tu rutina de cepillado. Es fundamental dedicarle más tiempo de lo habitual, puesto que, además de limpiar dientes y encías, debes prestar atención a los aparatos y, también, a los huecos que quedan entre ellos. La seda dental es un complemento imprescindible.
- Si llevas una férula removible, cada vez que la retires debes limpiarla en profundidad empleando un cepillo y productos de higiene oral.
- Guarda siempre tu aparato removible en su estuche, ¡y mantenlo también limpio! No apoyes el aparato en superficies como mesas o encimeras, ya que podría sufrir daños ¡y además se llenarían de gérmenes! Una vez a la semana puedes limpiarlo con unas pastillas efervescentes de efecto bactericida.
- ¡Cuidado con lo que masticas! Debes evitar tanto los alimentos muy duros (al masticar, podrías partir los aparatos y tener que acudir al dentista de urgencia) como los excesivamente blandos, de tacto pegajoso, ya que pueden adherirse a los aparatos y su eliminación es muy complicada.
- Nunca comas con la férula removible (ortodoncia invisible) puesta. Uno de los grandes beneficios de esta técnica de ortodoncia es que podemos extraer los aparatos de nuestra cavidad oral cuando sea necesaria. Quítatela para comer y, antes de volver a usarla, te recomendamos limpiar tanto el aparato como tus dientes.
- Con los aparatos fijos, visita al dentista cada seis meses. Los higienistas pueden realizarte una limpieza completa para eliminar la placa bacteriana que se acumula más de lo normal debido a la presencia de los brackets.